Hay una actriz, cuya carrera seguí
casi desde un principio… muy a mi pesar. Más que nada porque siempre estaba en
proyectos que yo quería ver, lo que incentivaba que despotricara contra ella,
la descalificara y maldijera su buena y mi mala suerte. Con el tiempo ella
creció o yo aprendía a aceptarla. Ya no me disgustaba (tanto) verla y hasta le
reconocía alguna que otra virtud.
El domingo, mientras hacía tiempo
hasta que empezara la obra que había elegido ver, me dedicaba a mi deporte
favorito: husmear en las librerías de viejo. Es natural que uno se encuentre
con actores en la calle Corrientes, allí están algunos de sus lugares de
trabajo: los teatros. La vi venir cuando salí de una librería. Llevaba un
hermoso abrigo marrón claro, una gran cartera, rouge carmesí en los labios y su
pelo lacio atado en una colita. Miraba hacia abajo, muy concentrada en sus
pensamientos. (Ahora ensaya una obra ¡que yo quiero ver!) Me detengo a verla
pasar. A unos metros de mí, levanta la mirada y veo sus ojos tristes enmarcados
en negro. Mi reacción es espontánea, impulsiva, irremediable. Levanto mi mano
derecha, uno el pulgar y el índice y hago el gesto de levantar un sombrero
imaginario. Ella se sorprende, me sonríe, saca sus manos enguantadas de los
bolsillos, las acerca a los labios y me sopla un beso.
Quedo
feliz y atónito. Descubro que la quiero.
y...? quien es la dama?????
ResponderEliminarMargot también quiere ir al teatro!!!!!
Pero caramba, usted sabe que la conocí por culpa de Nacha Guevara cuando se le ocurrió tener Alas.
ResponderEliminarEl año pasado anduvo por la tele, la pretendían Fernán Mirás y Rodrigo de la Serna y su personaje se llamaba Julieta Despeyroux
Usted se da cuenta a que extremos me lleva??? Tuve que googlear "Julieta Despeyroux" para saber quien era... Fácil pasa Ud del amor al odio.Es mas, por pura complicidad, en otras épocas, la he despreciado por su culpa ( jajaja, y por la de ella )
ResponderEliminarJe vous embrasse, Margot