La Plata es una ciudad que chorrea cultura. Hay música, teatro, pintura, literatura (ahora hasta estamos incursionando en la producción cinematográfica). Le hemos dado al país nuestra cuota de poetas, músicos, actores, compositores, novelistas, dramaturgos, cantantes, compositores, escultores (y hasta alguna que otra vedette). Pero mi máximo orgullo por la pertenencia a esta ciudad se aviva por lo que pasa a fin de año: la emergencia del verdadero arte popular. Espontáneo, solidario, anónimo, grupal, mancomunado: La elaboración de los muñecos de fin de año. Me da mucha alegría pertenecer a una sociedad de cultura emergente. La cultura emergente es algo tan pero tan raro que poquitísimas ciudades del mundo se dan el lujo de exhibirla. ¡Vivan los muñecos, carajo!
manda VOTO dejá un espacio 202 al 6357 es por Lito de Tradición Platense en 25 y 40
No hay comentarios:
Publicar un comentario